¡Bienvenido, Verdadero Creyente!
Alguna vez me has oído nombrar la Bat-Cueva, no es más que un garaje reconvertido en estudio, donde pinto y dibujo.
También aquí grabo y edito los vídeos que subo al canal de YouTube.
Además, en la Bat-Cueva guardo la mayor parte de mi colección de cómics en cajas y bolsas que yo mismo me hago.
A comer pipas al parque.
Todo empezó hace medio siglo; entonces no habían muchas distracciones: dibujos animados que veíamos en televisores en blanco y negro, ir al cine (esporádicamente), dar patadas al balón (buf!, lo odiaba), y los salones recreativos, con sus «matones» incluidos.
Y luego estaban los tebeos.
En mi casa había un montoncito que incluía algunas revistas de Editorial Bruguera (Mortadelo, DDT, Jabato Color, etc.), otras de Editorial Valenciana (Jaimito, Pumby, S.O.S., El Guerrero del Antifaz, Purk…) y otros que ahora no recuerdo.
Aunque sí recuerdo los que me regalaron.
El nº1 de Joyas Literarias Juveniles (la tía Amparín), el Skorpio nº0 (venía con el TelePrograma), un tochazo encuadernado de Hazañas Bélicas y similares (Vicente), un motón del Capitán Trueno (mis primos), los TBO 2000 (mis tías-abuelas), un Tintín (los reyes magos)… podría seguir así hasta el día de hoy, que me siguen regalando cómics, pero estábamos en los 70 y 80’s.
También llegaron a mis manos de adolescente otros tebeos, como los de la editorial Garbo, y otros que sería injusto no nombrar.
Pero lo que me impactó de verdad fueron los cómics Marvel, publicados por la Editorial Vértice y, más tarde, la Editorial Bruguera. En este vídeo te cuento cómo lo viví.
Luego llegó Cómics Forum.
Ya conoces la historia: la Editorial Planeta publicó muchas colecciones de la Editorial Marvel, especiales, series limitadas y probó distintos formatos y periodicidades. Se respetaban las traducciones y los contenidos, contenían pósteres, fichas de personajes… y secciones como el correo de los lectores… por primera vez sentíamos que no estábamos solos.
Las revistas de cómics para adultos.
Nada que ver pornografía; Toutain, Norma, La Cúpula y más editoriales se lanzaron a publicar contenidos muy diferentes a los que estábamos acostumbrados: Ilustración+Cómix Internacional, Totem, CIMOC, 1984, El Víbora, Creepy, El Cairo, Blue Jeans, Metropol y muchas más.
¿Vocacional?
Pues fifty-fifty, ¿porqué sino habría acabado haciendo Bellas Artes y seguiría comprando cómics? Es difícil explicar el impacto emocional que significó descubrir a gigantes como Corben o Moebius…
Pero, sobre todo y ante todo, el Rey de los cómics, Jack Kirby.
Recuerdo haber dibujado desde siempre.
Supongo que empecé como cualquier niño, sólo que nunca lo dejé. Creo haber dibujado todos los días de mi vida, aunque sólo fuera un «careto» en una servilleta. ¡Si hasta he dibujado hospitalizado! (X-Men)